SALIDA 23 DE MAYO
Como siempre, a las nueve de la mañana en la Plaza Castilla a esperar a que todo el mundo, bueno, a los socios que puedan o quieran asisitir, se presenten. 
Fotos de rigor, saludos, charla de lo más variada y partida hacia Bobadilla Estación. En un principio parecía que no iba a soplar el viento y era de agradecer. Pero nuestro gozo en un pozo. Aire y mas aire, de costado y a ráfagas que se hizo notar, haciendo el día un poco miserable. De todas formas sin ese aire fresco, seguramente el sol nos hubiese atizado con fuerza, así que no hay mal que por bien no venga.
La salida fue bastante modesta. La gente avanzó en grupo hasta Bobadilla Pueblo pero una vez allí alguien dió la voz de alarma y la gente empezó a correr como alma que se lleva el diablo, destrozando el pelotón en mil pedazos. De tal manera que, sin querer, dejamos atrás el tandem de Bienvenido y Manoli que llegaron cinco minutos después a la parada obligatoria en Sierra de Yeguas para el desayuno.
El día estaba ambientado. A pesar del aire hubo mucha presencia y eso se agradece al ver un grupo tan grande ocupar la calzada todos equipados con los mismos colores.
De Sierra de Yeguas partimos hacia Fuente de Piedra y allí intentamos deleitarnos con el color azulado que desprendían las aguas de la laguna moteada de flamencos. Hasta Humilladero, con un aire desagradable de costado continuamos la marcha. Unos por delante, los de siempre, los "fieras" y por detrás los demás, los menos "fieras", los que no tienen esa forma física capaz de alcanzar una buena velocidad de crucero o los que simplemente solo salen a disfrutar de su hobby, de las vistas que nos envuelven, de la bicicleta como medio de transporte y de diversión.
Así llegamos a Bobadilla Pueblo donde hay una parada de reagrupamiento. Nos reunimos todos. Aprovechamos para saciar la sed, esperar a los últimos. Arrancamos desde allí hasta Antequera todos unidos, como un gran peloton de profesionales a un ritmo llevadero. Cada uno buscando un hueco para afrontar el aire, acompañados en todo momento por la furgoneta de asistencia comandada por Antonio, nuestro presidente. Asi de cómodos hasta Antequera.
Fotos de rigor, saludos, charla de lo más variada y partida hacia Bobadilla Estación. En un principio parecía que no iba a soplar el viento y era de agradecer. Pero nuestro gozo en un pozo. Aire y mas aire, de costado y a ráfagas que se hizo notar, haciendo el día un poco miserable. De todas formas sin ese aire fresco, seguramente el sol nos hubiese atizado con fuerza, así que no hay mal que por bien no venga.
La salida fue bastante modesta. La gente avanzó en grupo hasta Bobadilla Pueblo pero una vez allí alguien dió la voz de alarma y la gente empezó a correr como alma que se lleva el diablo, destrozando el pelotón en mil pedazos. De tal manera que, sin querer, dejamos atrás el tandem de Bienvenido y Manoli que llegaron cinco minutos después a la parada obligatoria en Sierra de Yeguas para el desayuno.
El día estaba ambientado. A pesar del aire hubo mucha presencia y eso se agradece al ver un grupo tan grande ocupar la calzada todos equipados con los mismos colores.
De Sierra de Yeguas partimos hacia Fuente de Piedra y allí intentamos deleitarnos con el color azulado que desprendían las aguas de la laguna moteada de flamencos. Hasta Humilladero, con un aire desagradable de costado continuamos la marcha. Unos por delante, los de siempre, los "fieras" y por detrás los demás, los menos "fieras", los que no tienen esa forma física capaz de alcanzar una buena velocidad de crucero o los que simplemente solo salen a disfrutar de su hobby, de las vistas que nos envuelven, de la bicicleta como medio de transporte y de diversión.
Así llegamos a Bobadilla Pueblo donde hay una parada de reagrupamiento. Nos reunimos todos. Aprovechamos para saciar la sed, esperar a los últimos. Arrancamos desde allí hasta Antequera todos unidos, como un gran peloton de profesionales a un ritmo llevadero. Cada uno buscando un hueco para afrontar el aire, acompañados en todo momento por la furgoneta de asistencia comandada por Antonio, nuestro presidente. Asi de cómodos hasta Antequera.
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