SALIDA DEL 4 DE JULIO


Otro domingo más y otra salida con el Club para disfrutar entre amigos y haciendo lo que más nos gusta: coger nuestras "flacas" y pedalear, pedalear y pedalear hasta quedar saciado.
Este domingo no es que la salida haya sido muy larga, más o menos 61 Km., pero subir hasta Archidona y luego al Santuario de la Virgen de Gracia hace que la etapa tenga su puntito de gracia, válgame la expresión. La salida como siempre desde el punto de partida habitual : la Plaza de Castilla a las nueve de la mañana. Treinta socios con su monturas preparadas hacían acto de presencia para salir este día tan bonito; soleado, con una fresca brisa que acompañó en todo momento y un cielo inmaculado que hizo que disfrutáramos de las preciosas vistas que desde el Santuario nos esperaban .Desde Antequera partiríamos por el Polígono Industrial de nuestra ciudad dirección a las Huertas del Río, vigilados en todo momento por nuestra furgoneta de asistencia esta vez dirigida por nuestro amigo José Miguel. El ritmo a estas alturas del año, más bien alegre, como debe ser para unas piernas ya bien entrenadas y con unos cuantos de miles de kilómetros en ellas. No obstante, partimos en grupo hasta las Huertas del Río, donde allí su pequeña pero empinada subida empieza a hacer estragos entre nosotros y llega la escabechina. Pero como esto no acaba aquí, sino que continúa subiendo hasta Archidona, pues nada, a coger cada uno su ritmo que después hay que subir hasta la Virgen. Se trata de reservar fuerzas para la traca final y eso es lo que hicieron muchos; fueron relativamente tranquilos para hacer la ruta sin sufrimientos vanos. Una vez en Archidona, a mano izquierda nos encontramos con el desvío hacia la carretera que nos llevará hasta el Santuario. Una carretera de asfalto nuevo, primero con una larga recta y después con unas cuantas curvas de herradura que hacen que te retuerzas encima de la bicicleta para solventarlas. La suerte; el aire fresquito y las sombras que nos acompañan en casi todo el trayecto del frondoso pinar que nos guía a ambos lados del camino.
Una vez arriba disfrutamos de las increíbles vistas, hacemos fotos para el recuerdo, descansamos un poquito, bebemos agua, hacemos una visita a la Señora de Gracia y a bajar de nuevo hasta un reagrupamiento cercano donde nos espera el avituallamiento que cada uno haya elegido; a continuación de nuevo paso por las Huertas del Río con dirección a Antequera. Ahora, todo lo que tanto esfuerzo nos costó subir ahora bajarlo se hace en minutos. Ponemos la directa y bajamos a velocidad de vértigo. Cortamos el aire como torpedos alados agarrados fuertemente a nuestros manillares y en un visto y no visto llegamos a la pedanía archidonesa instalada al borde del Guadalhorce. Bajar es un placer exquisito pero que hay que cuidar al máximo ya que debemos extremar la precaución; a pesar de eso la gente disfruta en este tipo de bajadas.Todos en grupo, continuamos hacia Antequera pero a la altura de la I.T.V. nos desviamos a la derecha por una carretera superbacheada que nos lleva hasta los Llanos de Antequera. Paramos allí, a la sombra, porque a esas horas el astro Rey empieza a tostar de verdad y nos refrescamos en una pequeña fuente. Esperamos a los rezagados, a que llegue la Furgo y hacia Antequera en plan tranquilos por la carretera de Sevilla. Aunque deseosos de llegar a casa para nuestra merecida ducha; es un gustazo ir todos en bloque. Charlando, sin forzar, disfrutando del momento. El "CARPE DIEM" del cicloturista.En Antequera la vuelta publicitaria por nuestras calles y hasta el domingo que viene.

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