Salida del 14 de Agosto

Impresionantes imágenes de la Sierra de El Torcal.

Mediados de agosto. Mes de bochorno, de tierras sin verde que pinte el paisaje. Subir  El Torcal de Antequera. ¿Que os parece?. A nosotros bien, aunque a muchos no les convenció la idea y decidieron no salir dejando escaso de socios el pelotón. El por qué, ni idea. Vacaciones, playa, piscina, aire acondicionado, barbacoa y bebidas refrescantes... miedo a sufrir subiendo y subiendo desde que se sale de Antequera, al calor sofocante... En esta época del año ya se sabe.

La Boca del Asno responde a la antígua denominación árabe que se le daba a los Torreones de vigilancia, que eran los Hisn y que de ahí han derivado en Asno, existen numerosos lugares en España con esta nomenclatura, nada que ver con el cuadrúpedo, pero la historia es así. Era por tanto un lugar desde donde se divisaba gran parte del terreno circundante.

Se inicia la ascensión al coloso.

El Puerto del Barco visto desde la subida a El Torcal.

Lugar de descanso y reagupamiento tras el duro recorrido.

La firma de los participantes en la Plaza de Castilla.

Ermita del Santísimo Cristo de La Verónica.

La ruta en si no es muy larga; 59 Kilómetros. Salimos temprano como siempre de la Plaza de Castilla de nuestra ciudad que, por cierto, está a las puertas de que se inaugure la Real Feria y hacemos un calentamiento saliendo en grupo hacia Bobadilla, llaneando, a ritmo, charlando, con la furgoneta de asistencia a nuestra retaguardia con Antonio Rojas al volante y comenzando a sudar las primeras gotas pues el día viene caldeadito. Antes de llegar a Bobadilla nos desviamos a la derecha, cruzamos las vías del tren y tomamos la carretera del Canal hacia la de Campillos, una vía muy transitada en la que pusimos mas atención si cabe y en fila de dos llegamos hasta el desvío que nos indica el regreso hacia Antequera nuevamente. Pasamos por delante de la Estación de Bomberos y todavía en grupo llegamos a la Verónica, cruzamos el Paseo y la Plaza de Castilla, lugar de partida, subimos por la Avenida de la Legión donde la gente ya se va dosificando rompiendo el grupo y continuamos para llegar hasta el Nacimiento de la Villa. Y a partir de allí,  es verdad que la carretera empieza a picar hacia arriba seriamente con rampas del 8% con algún breve descanso al 5%, donde la poca brisa de aire que nos refrescaba desapareció y hubo que echar mano del agua fresca de los bidones para aliviar nuestras miserias. Pasando las curvas retorcidas de la Boca del Asno ya nos vamos acercando al final del primer calvario para empezar el último y más duro final donde las rampas se acentúan, el asfalto se vuelve rugoso e incomodo y el dolor de "patas" se acentúa por el esfuerzo. Y una vez alcanzada la cima todo un placer haber llegado. Parada de reagrupamiento y desayuno y ¡hala! a bajar lo subido con cuidado que, lo mismo que se sube muy despacio y con calma, ahora se baja muy deprisa hasta llegar al Restaurante El Mirador y hay que poner precaución. Una vez allí, comprobamos que estamos todos y después de la llegada de la "furgo", vuelta publicitaria y a llegar a casa satisfechos, contentos y a refrescarnos que tambien nos lo merecemos.

Salud y hasta la semana que viene.